sábado, 28 de agosto de 2010

Capitulo 4

Adam estaba apoyado en el balcón con gesto despreocupado. Cuando salí a echarle la bronca, él avanzó un par de pasos y me hizo callar con el dedo.

- No me interesa lo más mínimo la charla que me vas a echar, así que... ¿por qué no nos saltamos esa parte?- dijo, entrando a la habitación e inspeccionándola detenidamente.

- ¿Qué quieres?- repliqué entre dientes. Este tío me ponía de los nervios...

- Bueno... Voy a ir al grano... Tú me vas a ayudar a capturar a esos demonios.

- ¿¿¡QUÉ!??- grité yo, sorprendida.- Yo... no puedo ayudarte, lo siento.- comenté con una voz más calmada que la de antes.
- La cosa es que sí puedes. He consultado a mis superiores- apuntó con un dedo al techo- y dicen que están dispuestos a dejarte colaborar. Así que ya estás moviendo tu culo y ayudándome a cazarlos.

- Pues siento decirte esto- repliqué yo, enfurecida-, pero nadie trabaja a estas horas de la noche. Así que si quieres, ahí tienes una ventana abierta para poder cazarlos por tu cuenta.

Él se quedó estupefacto. Era la primera vez que lo veía así, y me alegraba que por una vez, no añadiera nada más. Y también que saliera yo ganadora de la pelea. 

Adam bufó, como si adivinara mis pensamientos, y dijo algo más:

- Muy bien. Pero mañana a las 3 de la tarde te quiero en la verja del internado. Ya te diré cómo escapar.

Y desapareció. ¡¡Al fin me dejaba dormir tranquila!!

Alguien llamó a la puerta. ¿¡Es que no me iba a dejar dormir en toda la noche!?

- ¿Y ahora entras por la puerta en vez de por la ventana?- inquirí enfadada tras abrir la puerta. Solo que no era la persona que esperaba. No era Adam... Sino Adrian.

- ¿Por la ventana? ¿Estás chalada?- sus ojos azules casi se salían de las órbitas.

- Emm... Qué va.- mostré mi mejor sonrisa convincente.- ¿Qué querías?

Él entró en la habitación y se sentó en la cama, ya abierta.

- ¿Estabas durmiendo?- preguntó, inspeccionando mi pequeño camisón de lino a rayas negras y blancas. A pesar que fuera invierno, en mi habitación hacía demasiado calor, de no ser porque a Adam se le había ocurrido abrirla para poder entrar.

- Iba.- respondí algo cortante. Adrian era el típico chico mujeriego que se había enrollado con 20 chicas en un mes. Vale, sí, lo reconozco, yo antes era casi igual que él... Pero ahora había puesto una distancia entre los chicos y yo. Solo una pequeña distancia...

Él sonrió.

- Pero aún estás despierta.- confirmó. Yo puse los ojos en blanco.

- Por supuesto que estoy despierta. Estoy hablando contigo.- contesté, remarcando lo obvio. Esto provocó una carcajada a Adrian.

- Cierto.- respondió. Se levantó de la cama y dio dos pasos, acercándose a mí. Inclinó su cabeza en dirección a mis labios, pero yo fui más rápida y le paré con las dos manos.

- Ey.. Quieto, casanova. Si quieres besar a alguien prueba con una chica a la que puedas alcanzar.

- ¿Quién dice que eres inalcanzable? Eres una chica, y yo un chico... Y apuesto lo que quieras a que te conquistaré tarde o temprano.

- Prueba a decirle eso a otra.- dije en un tono seco.- Ahora, necesito dormir.

Él pareció no hacerme caso, así que subí mi cabeza para ver qué demonios hacía. Pero lo que vi me dejó de piedra. Sus ojos eran de un color rojo carmesí, y su sonrisa se tornó malvada. Sus dientes eran perfectos, todos tenían la misma longitud... Cuando vio que tenía toda mi atención puesta en él, habló:

- Tú quieres besarme... Y lo vas a hacer.- su voz era tranquila y serena.

Era curioso, pero me sentía realmente atraída por él en estos momentos. Quería besarle. Lo quería más que nada en este mundo. Sus ojos rojos tenían ahora tonalidades azules. Esto me hizo suspirar de deseo. Necesitaba besarle.

Poco a poco, acerqué mi rostro al suyo, y me impulsé-puesto que soy más baja que él- para llegar a sus labios rosados y carnosos.

Y lo besé. Y él me devolvió el beso. No sabía por qué lo besaba, simplemente tenía que hacerlo. Algo en mí me obligaba a posar mis labios sobre los suyos, y a mover mi lengua junto a la suya.

Cuando terminamos, una voz a mis espaldas hizo que volviera en mí misma:





- Vaya... No estás de trabajo y ya has cogido a un demonio.





***

Siento no haber podido publicar antes, pero me fui de vacaciones ^^

Espero que os guste el capitulo. Comentad, xfa.

Savannah

2 comentarios: